jueves, 4 de junio de 2015
Reseña: PRONTO SERÁ DE NOCHE de Jesús Cañadas
Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:
PRONTO SERÁ DE NOCHE de Jesús Cañadas
«Pronto será de noche, pero no habrá diferencia. El cielo seguirá teniendo ese color incómodo. El fuego que baila en las ventanas sacará a la ciudad de su ceguera. Será de noche, pero no estará oscuro. Caerán pájaros muertos del aire. Golpeando el suelo con un sonido de guantes empapados.»
Ése de ahí es Samuel. Es policía, o lo era. Ahora está atrapado en un atasco infinito. Como tú y como yo. Miles de coches en medio en una autovía que se dirige hacia el sur; aunque eso poco importa. Lo que importa es que huímos. Somos una multitud desesperada rumbo a ningún sitio mientras el mundo se derrumba a nuestro alrededor.
La negrura se extiende detrás de nosotros, nos persigue. No nos queda más que avanzar. Los metros cuestan horas, el calor sofoca, el aire es de barro. Y justo cuando parece que nada puede empeorar, sucede: en medio de esta nada inmensa, un conductor ha aparecido muerto. Estrangulado.
Samuel necesita descubrir quién ha sido, y sobre todo por qué. Por qué aquí, por qué ahora. Mientras la oscuridad avanza y el tiempo se acaba, puede bastar un simple acto para darle sentido a todo.
Así que vamos, vuélvete a tu coche. Acurrúcate en el asiento. Cierra por dentro y, por favor, no te duermas. Por lo que más quieras, no te duermas. Porque cuando caiga la noche, tú podrías ser el siguiente.
Jesús Cañadas, el autor de las novelas «El baile de los secretos» y «Los nombres muertos», cambia de registro y nos embarca una road movie a cámara lenta, un viaje a ninguna parte repleto de angustia y desesperación.
Seguro que ya estáis acostumbrados, o incluso hasta los cojones de verme soltando aburridísimos monólogos internos sobre el mundo del terror en la literatura. Orígenes, influencias, reacciones... pero a veces para entender una novela de terror hay que comprender primero al terror mismo.
No me considero ningún profesional del mundo del terror, publicar ensayos mil y una veces repetidos ya se lo dejo a otros renombrados escritores que intentan aleccionarnos sobre que debemos sentir, sobre que reflexionar, que leer y que no. Siempre me he guiado por mi criterio, y las decepciones son a veces tan importantes como las alegrías. Gracias a ello, he descubierto una infinidad de muestras y facetas que es capaz de mostrarnos el mundo del horror, he aprendido que en buenas manos puede dar el mismo miedo un monstruo lleno de dientes y tentáculos que el vecino de al lado que no para de observarte por la mirilla. He descubierto que el infierno puede ser gélidamente caliente o abrasivamente frío. Me ha enseñado que la muerte tiene muchísimas caras...
... y a veces ninguna.
Y es que es un autentico salto de fe escribir una novela donde no sabes de que huyes, pero sabes que el fin está cerca.
Aún me acuerdo cuando asistí a la presentación, aquí en Madrid de la novela EL BAILE DE LOS SECRETOS de Jesús Cañadas, (Ajec, 2011) una locura que mezclaba terror salvaje y fantasía de la mas oscura en una trama con los juegos de rol como pieza fundamental. Mas tarde nos sorprendería saltando a la editorial Fantascy con LOS NOMBRES MUERTOS (2013) uno de los mejores pastiches lovecraftianos que, de nuevo en una mezcla de géneros, esta vez la aventura y el terror logró numerosas criticas positivas, la mía incluida.
Ahora, Jesús Cañadas escribe la que es ya octava entrega de la colección Insomnia de Valdemar, PRONTO SERÁ DE NOCHE con la que nos sorprende con un registro completamente distinto, pero no por ello perjudicando la calidad literaria a la que nos tenía acostumbrados, todo lo contrario.
Cañadas ha dejado de contarnos historias. Ahora nos traslada a ellas, nos las introduce en la mente como un pensamiento obsceno y nos la maltrata con la sutilidad de un ladrillo, golpeando repetidamente nuestras cabezas. Y lo peor de los golpes a veces es que no sabes por donde te van a llegar.
Ese desconocimiento es uno de los mayores atractivos de la novela, y una constante herramienta que, a modo de brújula estropeada nos guiará por la historia.
La primera pregunta que nos hacemos tras un primer contacto con PRONTO SERÁ DE NOCHE seguramente sea "¿Que está pasando aquí?" La idea del fin del mundo es una constante en los diálogos de los personajes, pero ¿A manos de qué?¿De qué huye todo el mundo?¿Qué está a punto de alcanzarles? Cañadas opta por el miedo oculto, el terror a lo desconocido, el mantener la presencia de un mal pero no enseñarlo, sugerir, no enseñar.
La intriga, así pues, será una constante a lo largo de toda la obra, pero no solo en ese elemento catastrofista que amenaza con acabar con todo y con todos, ya que, aparte de ser una historia de terror, el elemento policíaco tendrá bastante protagonismo, al fin y al cabo, es la historia de un asesinato en medio de una huida, y de como un policía intenta desentrañar el misterio.
PRONTO SERÁ DE NOCHE tiene la particularidad de ser una historia de espacio cerrado en un escenario muy amplio, su fotografía decadente y desesperanzadora es capaz de hacernos sentir claustrofobia pese a saber que los protagonistas e encuentran al aire libre. Recuerdo que cuando comencé a leer la novela iba en un autobús, había pillado un atasco de hora punta y hacía un calor asfixiante. Vamos, nada mejor para dejarse atrapar por la atmósfera opresiva de la historia. Cuando continué la historia, me encontraba sentado cómodamente en el sofá, con el aire acondicionado dándolo todo y cuando estaba abriendo el libro donde deje el punto de libro, al mismo tiempo pensaba para mis adentros que no, que no iba a ser posible volver a sentir esa incomodidad que sentí en medio de la carretera mientras un sol de justicia nos castigaba dentro de un cubículo con el aire acondicionado estropeado. Me equivoqué.
El autor no se come la cabeza llenando la narración de metáforas bellas pero a la vez oscuras, no tira de figuras literarias para darnos una falsa sensación de belleza en la destrucción. Sus frases cortas, cortantes y dilapidatorias son lo único que necesita para ponernos al volante de uno de esos innumerables coches atrapados en aquel atasco sin fin, mirar al cielo con desconfianza mientras oscurece y sentir la garganta seca pese a saber que una bebida bien fría reposa a tu lado.
El cine no suele conseguir esos efectos en el publico. Pero es que PRONTO SERÁ DE NOCHE no es una obra para ver en una gran pantalla, sino que uno mantiene la curiosa idea de verla como una obra de teatro, una especie de DIEZ NEGRITOS apocalíptica donde cada vez que la luz desaparece alguien muere y todos sospechan de todos. Minimalista, íntima, cuyas actuaciones, diálogos y emociones de los personajes no son eclipsadas por forzados trabajos de cámara ni efectos especiales innecesarios. Cañadas hace como su mejor aliado lo que tiene a mano, los mínimos recursos para ofrecer el mayor efecto devastador en el lector. No por ello deja de lado imágenes realmente impresionantes e impactantes, como la misma imagen del toro de Osborne que se muestra en la portada, amen de otras que no voy a comentar para que seáis vosotros los que descubráis los limites, o la falta de ellos a los que se puede llegar con apenas 250 páginas.
Porque os aseguro que esta novela no es bonita de leer. Cualquiera que haya leído EL BAILE DE LOS SECRETOS de Cañadas sabe que es un autor que no se censura en lo que a mostrar violencia extrema se refiere, pero en PRONTO SERÁ DE NOCHE no es el gore, ni los litros de sangre los elementos que producirán esa nausea ni malestar. Es peor. Ademas de su imagen sucia, oscura, deprimente y nada, nada esperanzadora, el autor da rienda suelta a lo que sabe que mas afecta al lector mas conservador, hace uso de esos tabús, de elementos delicados incluso para el género del terror y da rienda suelta a su mala ostia mientras se mea en la censura y la ética. Y no lo hace de manera forzada. Ya que el realismo y la familiaridad de sentimientos es constante en la trama, sus personajes son creíbles, son personas de la calle, sin ningún artificio que los convierta en caricaturas de lo que realmente son. No hay héroes, solo gente que huye.
Así pues, PRONTO SERÁ DE NOCHE es una apuesta arriesgada que el autor ha puesto sobre el tapete (No es una novela para todos los públicos, los que esperen escaramuzas, monstruos de moda o escenas heroicas se van a llevar un chasco) y con la que al menos a mi me ha desplumado en halagos. Jesús Cañadas, dentro de la colección Insomnia, ha conseguido crear la novela con la que me he sentido mas incomodo... por lo tanto, y con el permiso de mi siempre adorado David Jasso, su título se convierte en el mas imprescindible de todos.
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Me encanta tu blog, no lo conocía.
ResponderEliminarMe parece interesante el libro.
Por aquí me quedo. Un saludo!
La estoy leyendo ahora mismo. Confirmo tus palabras, una a una. La novela supura auténtica malignidad, una enigmática sensación de hostil fatalismo en cada página. Vamos, que me está encantando. Un saludo.
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