sábado, 28 de febrero de 2015

Reseña: UNA DE VAMPIROS de Martín Piñol.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

UNA DE VAMPIROS de Martín Piñol.

En Hollywood, hasta los vampiros quieren hacer cine.
Costales, un treintañero de Barcelona, egoísta y despreocupado, es enviado a Hollywood para cuidar de un joven depresivo que estudia cine. Pero el día en que Obama puede convertirse en presidente, el chaval es secuestrado por un grupo de vampiros que ruedan una snuff movie. Ayudado por un homeless ex marine con ansias de venganza, Costales tendrá veinticuatro horas para enfrentarse a estudiantes de cine, actores con pretensiones y otros seres del averno, y encontrar a su amigo. Retrato de los jóvenes cineastas del Hollywood actual, novela negra narrada con mentalidad europea y relato vampírico muy particular, lo que sí certificamos ante notario es que la lectura de Una de vampiros resulta maliciosamente divertida. Y si le hubiéramos puesto fotos y direcciones, también serviría de guía básica para la ciudad de las palmeras y las autopistas. Para que luego se diga que sólo aprendes cosas con las novelas históricas.

¿Os acordáis de cierta novela que surgió de la nada el año pasado que nos prometía una grandiosa historia terrorífica de vampiros? Tan magnifica que incluso se llevó un premio de lo mas cornudo... por una historia que no sabes si es terror, si es comedia, o si es una historia al menos...
Pero ahí está, en tapa dura y fardando de un premio por un amago de comedia encubierto por una supuesta novela de terror de vampiros como nunca se ha visto.

Por suerte, aún existen autores que, incluso bajo la amenaza de pasar desapercibidos en el mercado, al menos se molestan es aclarar lo que nos vamos a encontrar en las paáginas de su trabajo.
Un buen ejemplo es UNA DE VAMPIROS, escrita por Martín Piñol. Novela con la cual, he disfrutado muchísimo, pese a no ser un título que pase a la historia,  más que con ésa vanagloriada porquería.

A ver... para ser sinceros hay que tener en cuenta que compré esta novela por la misera cantidad de un euro. Valiendo eso, una de dos: O lo que me voy a encontrar es uno de esos libros que te hacen replantearte si sacarte los ojos y el cerebro o es que a la tienda le va muy pero que muy mal. Pues oye, ni lo uno ni lo otro.

UNA DE VAMPIROS no es la comedia del siglo, Ni siquiera es la novela de vampiros del año, pero ofrece lo que promete: un rato muy divertido. Sin más.
Estamos ante una lectura muy ligera, que no pretende ofrecer intrincadas reflexiones filosóficas sino mantenerte una muestra de sonrisa durante lo largo de lectura, cosa que muy a menudo consigue. Es, en definitiva, un "Lee y olvida en la estantería mientras acumula polvo".

Martín Piñol ha escrito una novela friki, escrita por un friki y destinada a los frikis. Un relato plagado de incontables guiños y referencias a la cultura pop, a los cómics y sobretodo al cine. Muestra de ello es el glosario de 10 páginas que encontraremos al final de libro donde se explican o resumen las más importantes menciones que casi todo adicto de éste tipo de frikismos debería conocer.No hay más que ver a Costales, su protagonista. Un personaje atípico, torpe, garrulo y encantadísimo de conocerse, una especie de detective de novela negra mezcla de Superagente 86 y adicto a los cómics y a las películas de acción que siempre se libra por los pelos de acabar descuartizado y repartido por los cuatro punto cardinales y, con un ego que no le cabe en el pecho.
Multitud de personajes llegarán y se irán a lo largo de un amplio recorrido por la ciudad de las estrellas (Sí en ocasiones, como dice el autor, nos encontraremos ante una guía turística rápida de Hollywood, así como el lado oscuro de las producciones independientes o las academias de cine), Frank, El Adolecedor, el matrimonio Corvo e incluso el mismo autor. Todos ellos funcionando como parodias o caricaturas de personalidades que vemos todos los días en el cine, adictos a dar sermones interminables cuando están a punto de matar a alguien, soltar frases ingeniosas segundos antes de que una explosión invada la pantalla, ése tipo de cosas.

Y por supuesto, no podían faltar los vampiros. En esta ocasión, estereotipados como los clásicos chupasangre de las películas de los 80, arrogantes, ingeniosos en ocasiones y más bestias que un bocadillo de escombros. Sin duda, algo muy de agradecer.

Sobre el estilo de la novela, tengamos en cuenta que estamos ante una comedia desenfrenada (y con abundantes dosis de acción heredadas de superproducciones cinematográficas) ... y éso a veces puede ocasionar problemas. Por supuesto que es divertida y sin duda te vas a reír, el problema viene cuando el autor quiere intentar buscar la carcajada en cada párrafo. Al principio lo consigue, pero a medida que avanzas sus coñas, escenas hilarantes y surrealistas, uso de comparaciones y salidas; terminan agotando no encontrando el limite en la búsqueda de la risa ajena y consiguiendo en ciertos puntos todo lo contrario: el bostezo. Al menos, Piñol no recurre a la clásica risa fácil usando elementos de moda, ni menciones a partidos políticos o personajes de prensa rosa. Recursos que preferimos que se quede en antologías de muertos vivientes que nunca tendrían que haber visto la luz.

Por suerte, UNA DE VAMPIROS es una novela ágil, que se lee de un tirón y funciona magníficamente como descanso tras una lectura mas compleja o como mero entretenimiento para un largo viaje en tren. No esperéis encontrar un clásico de la comedia ni un libro indispensable de vampiros. No obstante, sí que podréis encontrar esa sensación de identificación sin llegar al insulto que prometió en su momento VERANO DE MIEDO. Y por supuesto, con mucha más calidad literaria.

jueves, 26 de febrero de 2015

Reseña: PENÍNSULA Z de Javier Lacomba Tamarit



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

 PENÍNSULA Z de Javier Lacomba Tamarit

Madrid, año 2015. La España Peninsular es el único territorio del planeta totalmente indemne tras el alzamiento de los muertos, 72 horas después del fenómeno conocido como ‘Los Cielos Negros’. Los muertos han vuelto a la vida, colonizados por colmenas de insectos inteligentes de origen desconocido que solo piensan en la reproducción a través del contagio a otros anfitriones vivos. Para que ningún Colonizado camine sobre territorio español, el gobierno toma terribles medidas que son rápidamente silenciadas. También crea una división especial denominada ‘Recuperadores’, una fuerza encargada de detectar fallecimientos y deshacerse de los cadáveres antes de que supongan un riesgo de contagio, gozando de autoridad para juzgar y eliminar en el acto a aquellos que obstruyan su labor.

En este equilibrio precario, Juan y Catia, Recuperadores de la División de Madrid, averiguarán cuán lejos se ha llegado para proteger España del Apocalipsis cuando un bioterrorista llamado Lázaro amenace con desencadenarlo de nuevo.

... Y como quise dar a entender en la anterior reseña, en la variedad esta el gusto.

Volvemos al debate de siempre ¿Está la literatura Z muerta? (Aparte de sus personajes, entiéndase).
Soy fiel defensor de la idea de que mientras exista un solo escritor que escriba con ilusión sobre muertos vivientes, el género seguirá vivo. Y recalco lo de ILUSIÓN, ya que no cuento con los que se apuntan al tren de la moda y el dolar o al recurso fácil y luego lloran y lloran porque se han dejado los dientes del batacazo mortal que se han dado al descubrir que el mundo de la literatura no es tan bonito como lo imaginaban y que, a la que te descuidas, te llueven hostias colosales en forma de criticas negativas.
Porque reconozcámoslo, muchos hemos tenido la sensación de que cuando lees una novela de zombis, crees haberlas leído todas. Eso se debe al abusivo uso de la estructura base en la que se componen muchas novelas y películas de muertos vivientes y que se compone de los siguientes pasos:

a) Presentación de casos de extraños comportamientos de algunos sujetos, donde destacan violencia y canibalismo.
b) Se lía la de Dios es Cristo al propagarse la infección.
c) Grupo de supervivientes buscan un lugar donde refugiarse hasta que pase lo peor
d) Al final son los mismos miembros integrantes de este grupo los que acaban a ostias entre ellos.
e) (Opcional) Introducir un ejercito que más que ayudar la termina armando mas gorda.
f) (Opcional) Introducir un cura con el mismo propósito que el ejercito.

Y ya está. Y te crees que has escrito un bestseller y que todo el mundo va a querer comerte el rabo por lo bien que escribes y lo original que eres. Y cuando te das cuenta de que no es así,... bueno... Ahí estamos los que dejamos nuestras opiniones literarias para servir de saco de boxeo ¿Verdad?

Por suerte, aún quedan escritores que optan por no copiar por enésima vez el estilo diario que tanto popularizo Manel Loureiro en su APOCALIPSIS Z, o escribir sobre odiseas militares con enfermizas ideas patrióticas sino que, arriesgando algo mas que el pellejo, se lanzan a contar una historia con algún alarde de originalidad.
Claro está que el hecho de que la originalidad y la calidad vayan cogidos de la mano es, por supuesto, otra historia.

A nuestras oficinas de admisión de pacientes (Es decir, al buzón de mi casa) nos ha llegado una novela autopublicada del autor Javier Lacomba Tamarit titulada PENÍNSULA Z, que nos demuestra una vez más que no todo esta dicho en el mundo de la literatura zombi.

En PENÍNSULA Z se nos presenta un futuro ¿Distópico? en el que un buen día los cielos se cubren completamente de negro en todo el mundo y, desde ese momento, los muertos resucitan a las 72 horas de su muerte, al parecer controlados por ejércitos de insectos que invaden el organismo como si de un huésped se tratase, creando un monstruo sediento de sangre, rápido y ágil y con ¿Instinto de conservación? Si señores, es la primera vez que veo a un muerto viviente que sabe cuando la situación le supera y opta por esconderse o huir. Al principio puede resultar chocante, aunque en cierto modo está bastante bien planteado teniendo en cuenta, como he indicado anteriormente, que el cuerpo es controlado por insectos cuyo objetivo principal es la reproducción o propagación de la plaga de manera premeditada. ¿Invasión alienígena?¿Experimento fallido? Quién sabe. Hasta ahí bien.
El problema viene cuando se nos presenta el escenario donde transcurre la acción. Al igual que ocurre con sagas como CIUDAD HUMANA de Carlos J. Lluch o APOCALIPSIS ISLAND de Vicente García, Tamarit nos sitúa en un futuro no muy distante (2016) donde, al loro... España es el único país que ha sobrevivido al apocalipsis. Si, como lo oís, aquí donde nos veis de un día para otro nuestro preparadísimo gobierno es capaz de levantar muros que cierran la península de las fronteras de Portugal y Francia, aislándonos, y convirtiéndonos en una comunidad autosuficiente, amen de otras medidas extremas que harían tocarse de gusto a Hitler y siendo capaz ademas de, en apenas un año, avanzar tecnológicamente de manera pasmosa.
Vale que el autor quiera hacer una especia de distopía de ciencia ficción, pero creo que uno de los pilares fundamentales de una novela de muertos vivientes es la credibilidad de los hechos. CIUDAD HUMANA o APOCALIPSIS ISLAND lo consiguen, creando una sociedad en algunos aspectos bastante arcaica y llenas de lagunas a llenar. Algo muy comprensible cuando tenemos en cuenta que el mundo acaba de sobrevivir al mayor desastre de su existencia. Pero es que lo de PENINSULA Z da a pensar que, joder, la destrucción del 99% de la humanidad, incluyendo superpotencias como Estados Unidos, China o Inglaterra no solo no ha perjudicado a España, sino que la ha ayudado a progresar.
En conclusión, estamos ante un telón de fondo que ya desde un principio nos hace perder credibilidad desde los primeros hechos, el cual ya se sostiene con un fino hilo que termina rompiéndose a medida que avanzamos en la historia.

Y es que, aunque por ejemplo la figura del Recuperador (Personas encargadas de localizar difuntos recientes para evitar la transformación) es un elemento de lo más interesante y significativo, hay veces que una buena historia puede ser muy atractiva con pocos detalles. En PENINSULA Z se tiende a complicar la trama, añadiendo elementos que no se cree ni el más optimista ni aunque estuviéramos hablando de un relato ambientado cien años adelante en lugar de uno.
También creo, que es importante mantener el interés inicial que se le quiere otorgar al lector basándose en las impresiones que suscitan las primeras páginas de la novela. Lo que en un principio empieza como una buena mezcla de terror y novela negra, empujada por la misteriosa figura del personaje Lázaro, termina convirtiéndose en una declaración de intenciones y una crítica hacia el modelo del gobierno español y sus maneras de afrontar las crisis como intentando al mismo tiempo abrirnos los ojos y descubrir que no se diferencia mucho del actual.
No obstante, la trama esta muy bien hilada, resulta interesante y terminamos lamentando que no se haya podido exprimir todo el zumo de las naranjas que el autor guarda en su cabeza, que estoy seguro que no son pocas. Muestra de ello son las últimas paginas que, en forma de blog, funcionan como una especie de precuela donde se narran los primeros días o como aquí se lo conoce, el Día de Eclosión.

Y aquí van las dos hostias con la mano abierta:

La primera por la portada.
Es normal que un autor busque en su portada llamar la atención del lector con imágenes atrayentes, ya sea por su apartado artístico o por lo macabro, como es el caso que nos ocupa, pero... ¿Que cojones tiene que ver en este caso el continente con el contenido? Nada en absoluto. La señorita vestida de lolita portando un hacha y de sonrisa macabra nos da a entender que estamos ante una historia de zombis inteligentes y crueles. Pero como indiqué anteriormente, salvo por un ligero instinto de supervivencia los Colonizados, como aquí se les llama, no dejan de ser muertos vivientes que corren mucho pero cuyo coeficiente no es suficiente para mostrar sentimientos o portar armas. Vamos que es como poner una foto de Lady Gaga en una revista de estilismo.

La segunda hostia va para lo mismo de siempre.
La primera edición de esta novela apareció en formato digital en el año 2013. La edición que poseo se llama, no se por qué , Extreme Edition. La cual, según compruebo, es una versión revisada. ¿Revisada de qué? Porque de ortografía y gramática no lo creo. Siempre, siempre se escapa algún error. A mí a montones como veréis (Aunque yo no vendo mis publicaciones) que falten tildes, perfecto, que por maquetación desaparezcan letras o palabras enteras, ngh,,, duele, pero se respeta. Pero encontrarme cosas como un "hay" en lugar de "ahí" o expresiones como "El horror presionó su nuez como una garganta invisible" (¿Garganta? no querrás decir mano?) pues resultan cuanto menos ofensivas, mas cuando estamos hablando de una supuesta edición REVISADA. Es más, ¿Dónde esta la tilde en el título?

Concluyendo, PENÍNSULA Z es una novela corta, que hay que reconocer que entretiene y que esta llena de ideas jugosas que pueden dar mucho juego si se cambiaran otras bastante exageradas y poco creíbles. Mantiene un concepto que da, como mínimo, para una novela larga e incluso para un par más de títulos si el autor se explayara mas en ciertos detalles, argumentara más los hechos y, por consiguiente, dotara a la narración de una credibilidad que, por desgracia, no disfruta.
PENÍNSULA Z como borrador o boceto, no es bueno, es GENIAL, pero como producto final, solo entusiasmará a los más iniciados en el género.



martes, 24 de febrero de 2015

Reseña: LUCIFER 113 de Jonathan Maberry



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

LUCIFER 113 de Jonathan Maberry

El doctor Herman Volker ha estado investigando una nueva fórmula. Quién mejor para probarla que el desalmado asesino en serie Homer Gibbons. Donde muchos ven una merecida pena de muerte por inyección letal, Volker ve una oportunidad de hacer justicia. Le inyecta a Gibbons el fármaco que hará que mantenga la conciencia mientras su cuerpo se pudre en la tumba. Desgraciadamente, nada sale según lo planeado. En vez de ser enterrado en la prisión, llevan al asesino al cementerio de una pequeña ciudad de Pensilvania. Y toda sustancia experimental tiene efectos secundarios imprevistos... El criminal despierta antes de que lo entierren. Está hambriento. Infectado. Y es contagioso.

Cuando la agente Dez Fox llega al camposanto, solo encuentra un par de cuerpos a medio masticar y una bolsa para cadáveres... vacía.

Cuando uno se aficiona a un género literario concreto, mas temprano que tarde suele ocurrir que la falta de ideas o la casual semejanza de estas entre una obra y otra se vuelva algo demasiado evidente.
No faltarán nunca ideas originales, algunas con un fuerte sentido filosófico, otras incluso poético o con un argumento tan llamativo y poco común que nos atraiga mas que las demás.
... Por cierto, si no se ha notado estoy hablando del género zombi.

Para muestra un botón. Voy a resumir una novela de literatura Z:

La novela nos sitúa en un pueblo pequeño de pocos y pacíficos habitantes. De repente un suceso extraño ocurre en un tanatorio. Un muerto viviente surge a raíz de un experimento fallido o cualquier otra razón y empieza a infectar a la población. Cuando la situación es insostenible, el ejercito manda toda la artillería pesada con una única orden: Aniquilar cualquier rastro de vida, esté infectado o no. ¡Ah! para colmo ademas de las hordas de caníbales putrefactos deambulando por las calles vamos a añadir una terrible tormenta para dar mas chicha al asunto. 

Cualquiera que lea este resumen habrá pensado "¡Anda! acaba de resumir ZONA CATASTRÓFICA de Antonio Sánchez Vázquez, publicada por la Editorial Universo en 2013 (si no recuerdo mal)". Pues no, acabo de resumir la novela que hoy nos ocupa, LUCIFER 113 de Jonathan Maberry, publicada por primera vez en 2011.
Con esto no estoy diciendo que nuestro dicharachero Señor Catástrofes se haya plagiado de la obra de Maberry, tengo claro que no es así. Sino que era cuestión de tiempo que el afloramiento de un género tan recurrido como es el de los muertos vivientes llegaría en algún momento al punto de colapso que tendría como primer síntoma la semejanza indirecta de ideas a la hora de escribir una novela.

Tras PACIENTE CERO, Jonathan Maberry nos trae una nueva novela de muertos vivientes que, sin llegar al punto de la amenaza global camuflada en tecnothriller con talibanes de fondo y armamento ultrafuturista sigue pareciéndose a una superproducción hollywoodiense con la que Michael Bay se tocaría imaginándose la cantidad de explosiones y tormentas de balas que podría incluir en una película. LUCIFER 113 quiere homenajear en cierto modo al maestro Romero y su época dorada, ofreciéndonos la clásica linea argumental de amenaza zombi/supervivientes/ejercito que termina liándola mas parda que los pobres muertos vivientes. Es decir, nada nuevo bajo el sol pero que sin embargo el autor sabe llevar al terreno del entretenimiento de una manera de lo mas gratificante precisamente por el uso de elementos comunes que siempre solemos criticar pero con los que al mismo tiempo nos sentimos identificados.
Eso incluye unos personajes estereotipados que hacen que nos sintamos a gusto con la historia, entre los que se incluye una agente de policía mas basta que un batido de cemento con problemas de temperamento y bebida (Algo así como un John Mclane con tetas) un agente compañero de color que siempre intenta mostrar su lado mas paternal con ella y ver el lado bueno de las cosas o un periodista metomentodo en busca del Pullitzer a la mejor noticia del estado. Todo esto y mucho mas se enfrentará a una amenaza inesperada y de lo mas cruenta cuando creían que lo mas inaudito que iban a sufrir esos días iba a ser la aparición de una tormenta mas fuerte de lo normal.

Y por supuesto ración doble de patriotismo y de "mira que chulos somos en el ejercito de los Estados Unidos de América". Eso si, a favor de Maberry hay que decir que estos soldados muestran un poco mas de cabeza e inteligencia que el retraso mental que sufrían los que protagonizaban obras como SPANISH ZOMBIES o RENAISSANCE (No es cebamiento, son los primeros ejemplos que me han venido a la cabeza).
Un punto original que me ha parecido agradable es la importancia que en LUCIFER 113 se le da al tema de los medios de comunicación, dotándole a estos de una fuerza que pocas veces se tiene cuenta aunque ya nos dejó claro en obras como FEED de Mira Grant, aunque aquí no de una manera tan extrema (Recordemos que el argumento de FEED gira prácticamente en su totalidad en torno a este tema) pero que sí le añade un tono mas ideológico o aporta para variar un nuevo arma para enfrentar a momentos de crisis como es la voz y las imágenes.

Y hablando de imágenes, el salvajismo de alguna de ellas van a ser constantes a lo largo de la historia. Maberry se relame y se explaya en cada muerte y destripamiento para goce y disfrute del lector, al igual que las escenas heroicas donde los protagonistas salvan el culo por los pelos incluyendo de vez en cuando frases ingeniosas que nos hacen disfrutar como enanos aunque en el fondo estemos rechinando dientes y pensando "ni en tus mejores sueños pringado"

Así que, tras PACIENTE CERO, obra que aunque algunos no entiendan disfruté mucho, en LUCIFER 113 encontramos una novela de consumo rápido, muy entretenida por las altas dosis de acción, sustituyendo al terror, y algún que otro elemento original (como el origen de la infección) pero que peca muchísimo por la falta de esta misma originalidad en lo que se refiere a desarrollo, escenas de drama,  acción/ reacción, personajes o escenarios. Obra muy disfrutable para puristas que disfrutan leyendo la misma historia contada por gente distinta, muy bien escrita y con un desenlace de los mejores que he leído en mucho tiempo, pero a evitar por los que en cada titulo de zombis buscan algo nunca leído o lecturas profundas que van mas allá de la supervivencia de unos pocos ante una amenaza imparable.

Al fin y al cabo, así es como acaba el mundo. No con una explosión, sino con un mordisco.

jueves, 19 de febrero de 2015

Reseña: GESPENST de Ignacio Cid Hermoso.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

GESPENST de Ignacio Cid Hermoso.

Durante la fiesta que Mario y Alicia celebran en su casa con motivo de la nueva exposición que exhibirá la pintora en los próximos meses, Carlos, el hijo de la pareja, desaparece a orillas del pantano. El pantano de Nueva Luarma, ese ojo oscuro que se tragara al antiguo pueblo en años de posguerra, es ahora un misterio fagocitador, un imán de leyendas y folklore alimentado por los nuevos habitantes de esta zona en la sierra de Madrid.

A la desesperación y la angustia derivadas de la pérdida se unen los problemas matrimoniales que atraviesa la pareja, demasiado supeditada a los vaivenes emocionales de Alicia. Es entonces, en esa atmósfera enrarecida en la que los amigos de Carlos parecen saber más de lo que cuentan y la policía trata de investigar el paradero del niño, cuando una serie de fenómenos extraños comienzan a hacer tambalear la cordura de Mario.  ¿Se trata del fantasma de Carlos? ¿Acaso trata de decirle algo? ¿O puede que tan solo sea producto de su mente agotada y su corazón entristecido?

Las historias de fantasmas siempre han estado presentes en mi mente desde que tengo recuerdos. Son muchas las muestras vistas y leídas que estas figuras han protagonizado, desde niñas orientales que parece que no se peinan nunca, madres vengativas que te la lían parda si entras en sus antiguas viviendas o antiguos pacientes de manicomios encantados que nunca necesitan un justificante de demencia para joderte la vida. Si, las historias de fantasmas se remontan desde el origen de los tiempos. Sin embargo yo al menos soy bastante reacio a llamarlos "monstruos", porque tampoco son pocos los ejemplos en los que dichas apariciones llevan el mal consigo, sino que muchas veces es la destrucción de la inocencia mas pura, de la injusticia o de la maldad de otras personas las que dan origen a la figura del fantasma.

Me gustan los sustos, los golpes de sonido en las escenas en las que hace aparición la figura vaporosa del difunto, las historias de venganza y la lucha contra lo sobrenatural. Pero si hay una historia de fantasmas que realmente me caló hondo no fue por el terror que generaba, ni por lo monstruoso y desagradable del fantasma. Sino por la tristeza que emanaba la historia, la aniquilación de una vida llena de inocencia y sin maldad, de una nueva definición de lo que podríamos denominar fantasma. Esa obra es El Espinazo del Diablo, película que no nombro por primera vez en este blog.

Y vuelvo a nombrarla porque la nueva novela de Ignacio Cid Hermoso, GESPENST, en cierto modo me ha hecho recuperar esas mismas sensaciones que disfruté/sufrí con la película de Guillermo del Toro.
Cualquiera que haya leído una obra de este escritor sabe de lo que es capaz de hacer. Es la perfecta muestra de que a veces duele mas que te apuñalen el corazón con una pluma que con una espada y a medida que leemos sentimos que es el mismo autor el que va escribiendo frases en la frágil piel de nuestras almas, no con un lápiz, sino con un bisturí bien afilado, con lo que al finalizar una de sus obras nos sentimos desangrados, desnudos, como si se nos hubiera muerto algo dentro, algo que no es material, pero igualmente doloroso.

Muestra clara son sus dos novelas negras, EL OSITO COCHAMBRE y NUDOS DE CEREZA (Reseña AQUÍ) y es sobretodo con esta última con la que GESPENST guarda mas semejanzas. sobretodo en lo que se refiere a un tipo concreto de fantasma que prevalece en la historia: el fantasma del pasado. Muchas veces mas terrorífico y doloroso que lo que pueda hacer un ser ectoplasmático.

GESPENST es, como bien se dice, una historia de fantasmas reales y fantasmas imaginarios, y, aunque no va a faltar ese tinte sobrenatural en el relato, no le hace sombra a los que invaden los corazones de los protagonistas.

Y serán estos protagonistas los que lleven buena parte del peso en la composición de la novela. Tan claros y bien cincelados que Ignacio Cid es capaz de hacer que adivinemos quien habla sin necesidad de decírnoslo. No serán muchos, predominando en protagonismo Mario, Alicia, Carlos y sus dos amigos Javier y Alberto, entre los mas destacados, ademas de la figura del inspector Somoza, un personaje al que personalmente he cogido mucho cariño y estoy prácticamente convencido de que en un futuro podría dar mucho juego, aunque fuera en precuelas o historias independientes.

Si, los protagonistas tienen buena parte de la culpa de que GESPENST sea una obra ágil, adictiva y emocionante, pero el que lleva la batuta es sin duda el narrador que es Ignacio Cid Hermoso. el uso de metáforas tan bellas como inquietantes, figuras retoricas y literarias y composiciones que en muchas ocasiones se acerca a la poesía nos descubre a un autor cada vez mas maduro en su estilo, mas seguro y convencido de lo que quiere escribir, y eso, directa o indirectamente nos convierte a nosotros en lectores contentos y agradecidos con lo que leemos, por mucho que duela (que va a doler) y por mucho que suframos (no te haces aún idea) con sus obras. Si en la anterior reseña decíamos que Bueso escribe desde el odio, Nacho Cid lo hace desde la mas profunda desesperanza, buscando la desilusión y recordándote a golpe sangrante que la vida real no es un cuento de hadas. Ya lo dije una vez: Hay escritores que nos cuentan lo que queremos leer, y luego hay unos poco como Ignacio que escriben sobre lo que debemos leer, por mucho que duela.

Pese a ser su primera novela larga dentro del género del terror, hay que reconocer que aun así sigue predominando el misterio y el drama. lleno de giros argumentales, ayudado por flashbacks que unas veces confunden y otras aclaran. No van a faltar escenas escalofriantes, sustos ni, por supuesto secuencias donde el salvajismo toma el relevo, pero GESPENST es una obra de las que optan por arrancarte las lagrimas dando ideas en lugar de gritos dando imágenes.

Si no conocéis a este autor, esta obra, la cual se ha convertido enseguida en uno de los mejores títulos que ha publicado Dolmen en su Línea Stoker y en general, es ideal para descubrir las maravillas que una novela puede hacer por ti, descubriéndote emociones que creías o bien extintas o bien inexistentes. Si ya habéis leído algo de el, os aseguro que no os va a defraudar. Espectacular de principio a fin, Dura y fría como la losa de una lapida. E igual de triste.

martes, 17 de febrero de 2015

Reseña: ESTA NOCHE ARDERÁ EL CIELO de Emilio Bueso.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

ESTA NOCHE ARDERÁ EL CIELO de Emilio Bueso.

La Trans-taiga es la carretera más larga y solitaria que puede recorrerse en el vasto norte canadiense: más de seiscientos kilómetros a través de un desierto boreal que mueren de pronto junto a un embalse abandonado. Un sitio que cruzar en moto, donde perderse con una mujer casada, acampar bajo la fosforescencia de la aurora y la lluvia de estrellas. Ése era en un principio el plan de Mac. Mac es un tipo que a veces necesita medicación y cuyos planes, a menudo, salen mal. Mac entiende de carburadores, de ataques de pánico y de y de rock and roll. De lo que no entiende Mac es de avionetas de contrabandistas en vuelo rasante, de armas biológicas y ancestrales secretos de los indios cree. Y va a tener que aprenderlo todo en una noche.

Un thriller que combina sorprendentemente elementos genéricos diversos, desde el terror al western, y en el que Emilio Bueso se confirma como uno de los narradores más sólidos y originales de su generación.

El procedimiento para leer una novela suele ser bastante sencillo y común en casi todos los casos:

Primero uno compra el libro, ya sea atraído por el argumento, el nombre del autor o su llamativa portada. A continuación se procede a su lectura. Puedes tomarte para ello el tiempo que necesites. Una día, una semana, un mes o un puto año. Por último se cierra el libro con satisfacción o asco y se medita sobre lo que has leído, pero lo justo, no te agotes demasiado, solo hasta que dejes el libro en el hueco de la estantería y cojas el siguiente.
Con la obra de Emilio Bueso el procedimiento cambia drásticamente. Si, lo compras. Si, también lo lees. Pero entre el momento que terminas el libro hasta que consigues dejar el libro en su sitio uno siente que pasa una convalecencia entre las sabanas de la cama de un hospital, mientras los pitidos del respirador te ensordecen sin permitirte recuperarte del todo de la paliza sin piedad que has recibido.

Porque así es como te suele dejar una lectura narrada desde el odio y un cabreo de mil pares de cojones. Y ESTA NOCHE ARDERÁ EL CIELO no anda precisamente escaso de ese elemento.

No es nada nuevo. Bueso nos ha acostumbrado a lecturas agresivas, violentas y sin piedad.Tanto EXTRAÑOS EONES como DIÁSTOLE son novelas que asfixian el alma y escondían los cadáveres en una fosa poco profunda, solo para que no nos fuera demasiado difícil recuperarlas. Sin embargo, en esta novela en lugar de atormentar nuestras almas y encoger corazones, opta por esperarnos en un callejón oscuro con un bate de baseball y la idea fija de hacer gravilla cada uno de nuestros huesos.

Leer a Bueso nos descubre varias cosas. Lo primero es que no es un narrador al que le caigamos bien, ni lo intenta y ni puta falta que le hace. Lo segundo sin embargo es la facilidad que tiene de atraparnos, de sentirnos participes de la narración, ayudado ya no solo por una trama absorbente, sino por un lenguaje soez, censurable, y ¿Que atrae mas que aquello que dicen que puede ser malo para nosotros?

ESTA NOCHE ARDERÁ EL CIELO puede parecer por momentos una Road Movie (Pero de las de Robert Rodriguez, de las que te dan un giro de 180º a mitad de película), un western, un relato de terror con tintes de ciencia ficción, una autobiografía encubierta, un papel arrugado tirado a la papelera de sueños y esperanzas o una soberana ida de olla. Puede no ser ninguna de esas cosas o ser todo esto bailando dentro de una batidora en marcha, lo que si puedo asegurar es que estamos ante una novela divertidísima, atrayente, dura y tierna a partes iguales y sobretodo, con esa seguridad de estar leyendo un Bueso sin necesidad de leer su nombre en la portada.

En esta ocasión Emilio Bueso recurre lo mínimo posible a los diálogos, dejando campo abierto al escenario y a los actos que nos presenta el narrador con un estilo peculiar en su uso de ingeniosas metáforas en ocasiones o expresiones tan directas que te dejan noqueado en otras. Sin faltar alguna que otra carcajada en situaciones donde menos lo esperas.
Dicho narrador no solo tiene importancia a la hora de desarrollar la historia, sino que en ocasiones se la zampa, causándonos mas atracción su monologo interiorista sobre la puta mierda que es todo que el destino de los personajes, con lo que no son escasos los momentos en los que los actos que ocurren dentro de la cabeza de los protagonistas, especialmente en la de Mac, que funcionará como un lápiz en un pasatiempo de "une la linea de puntos para descubrir el dibujo que se oculta".

Tampoco se han olvidado de invitar al factor suspense en la trama, ya que, sobretodo durante la primera mitad de la lectura se nos irán añadiendo mas y mas elementos que a primera vista nada tienen en común para, mas tarde ir entrelazándose sin dejar cabos sueltos... aunque si demasiadas casualidades para mi gusto, esa sensación de no creerte que todo esta ahí en el momento justo para la inminente convergencia de elementos. Quizás ese factor, exceso de casualidades y necesidad de no dejar cabos sueltos sea la única pega que a nivel personal he encontrado.

Bueno, y el personaje de Perla, pero no es culpa suya. Lo que ocurre es que un personaje como Mac es capaz de eclipsar a cualquier otro. Mac no es el clásico héroe con chupa de cuero (que la tiene) armado con una escopeta (que la tiene) dispuesto a lo que sea por salvar a su chica de cualquier cosa (ejem...), mas bien estamos ante un carácter muy evolutivo acorde a las situaciones que le toca vivir y bastante personal, da la sensación, aunque seguramente me lo esté inventando, de tener algo de autorretrato del autor,

ESTA NOCHE ARDERÁ EL CIELO es, en definitiva, una de esas novelas que, al terminarlas tu mente exige un respiro. No por ser cargante ni pesada, para nada, sino porque sabes que cualquier historia que quieras leer luego no va a ser capaz de romper la coraza que Bueso deja en la mente. Es como cuando te tomas un batido de Cacaolat... luego todos los demás batidos de chocolate te saben a agua.

Una novela que parece escrita mas para satisfacción personal que para la del publico, que puede ser disfrutada al final por cualquier tipo de lector (siempre y cuando estés listo para una sesión de bullying mental) que empieza como una buena historia debe empezar y acaba como una buena historia debe acabar, con un plano de una infinita carretera solitaria, fundido en negro y Don´t Fear The Reaper de los Blue Oyster Cult sonando de fondo.

viernes, 13 de febrero de 2015

Reseña: LA JOVEN AHOGADA de Caitlín R. Kiernan.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

LA JOVEN AHOGADA de Caitlín R. Kiernan.

India Morgan Phelps –Imp para los amigos– es esquizofrénica. Ya no puede confiar en su propia mente, porque está convencida de que sus recuerdos, de alguna manera, la han traicionado, forzándola a cuestionar su propia identidad. 
Enfrentándose a sus propias percepciones, Imp debe descubrir la verdad sobre su encuentro con una maligna sirena, o un lobo de­samparado que se le apareció como una joven salvaje, o ninguna de estas cosas, sino algo mucho más extraño… algo que transita por los intersticios de la realidad.

Las novelas por lo general no dejan de ser un sencillo viaje donde arrancamos nuestros pasos en la introducción, tomamos varias fotos en el nudo y reposamos los pies en el desenlace. Puede que el viaje sea satisfactorio o no. Puede que nos guste tanto que queramos volver pronto o, por el contrario decidamos no volver a pisar esos paisajes. La cuestión es que una novela comienza, acaba, y volvemos a nuestra vida cotidiana rumiando vagamente en nuestro interior el camino recorrido. Eso es lo normal.

LA JOVEN AHOGADA de Caitlín R. Kiernan, mas que un viaje es una experiencia. Y una a la que nadie está preparado.

Y esto es así. Por mucho que uno se mentalice, por mucha imaginación que uno tenga para dilucidar sobre de qué trata la novela o que tipo de relato va a encontrar en sus páginas, puede irse mentalizando de que se va a equivocar.
LA JOVEN AHOGADA puede ser considerada de muchas maneras distintas. Unos verán por encima de todo un relato de fantasmas, otros una historia de amor. Y no lo faltarán los que solo encontrarán una soberana ida de pinza. Es por ello que una de las cosas que hay que tener en cuenta de este libro es que no esta escrito para todo el mundo, sobretodo aconsejaría no acercarse a ella a la gente que quiere una historia bien mascadita, clara y en linea recta, porque la vida de Imp dista mucho de ser cualquiera de esas cosas.
Kiernan ha creado un trabajo muy ambiental, cuya atmósfera atrapa desde un primer momento. En ella, la protagonista India Morgan Phelps, la cual sufre esquizofrenia hereditaria irá narrándonos los últimos acontecimientos que ha vivido/sufrido plasmándolos en papel a modo de ¿Terapia autoimpuesta?¿Guiada por una personalidad o identidad que ella misma desconoce? ¿Quién sabe? donde no solo primara la importancia de los sucesos que irán ocurriendo, sino en como afectan estos a la protagonista y, en consecuencia, en su manera de narrarlo, teniendo como resultado capítulos de verdadera belleza caótica nacidos de la locura y la desesperación.

Y si la novela destaca por su ambientación, que cabalga a medio camino entre el terror mas moderno y el mas tradicional, su carácter experimental no se queda atrás. Podemos imaginar el tomo de LA JOVEN AHOGADA como una caja, en cuyo interior encontraremos muchísimas piezas de un puzzle. Sera labor nuestra colocarlas en su sitio para dar coherencia a la historia. Esto a la hora de la lectura se traduce en idas y venidas de la narradora para contarnos cosas, cambiando de tema constantemente y volviendo al anterior sin previo aviso, divagaciones, y demás muestras literarias que rozan el ensayo, la metaliteratura o la escritura automática del subconsciente. He leído pocos libros que recurran al uso de imágenes y recursos literarios similares a los que me he encontrado en esta novela, pero mas de una vez me ha venido a la mente la obra de Mark Z. Danielewski, como su CASA DE HOJAS.

Una obra obra muy ambiental, tremendamente ambiental... ¿Podemos añadirle algo mas? Pues si. LA JOVEN AHOGADA es uno de esos libros que podriamos tachar de obra multimedia. Son numerosísimas las referencias a obras artísticas, canciones, acontecimientos del pasado (Algunos ficticios, la mayoría reales) que nos harán desear investigar y buscar relaciones por internet para dar veracidad a las narraciones de IMP, y os aseguro que mas de una vez os vais a quedar sorprendidos.
No van a faltar numerosas referencias a cuentos populares y obras clásicas como La Sirenita, Caperucita Roja o Alicia en el País de las Maravillas, elementos que no hacen sino embellecer así como llenar de confusión, mas si cabe, la lectura.

Imp sin duda funciona como un espejo del alma, donde es fácil, tras quitarle el vaho que lo empaña ver reflejados nuestras inquietudes, miedos y deseos, al mismo tiempo de mostrarnos otra imagen, juguetona a veces, cruel en la mayoría que nos hará incluso dudar de lo que leemos, ¿Que es cierto y que es falso?¿Que se inventa la locura de la protagonista?¿Como puede contradecirse tanto y a la vez jurar por la veracidad de los hechos?

Cualquiera que lea esta opinión seguramente esté dando pasos atrás, sintiéndose espantado por lo que supone leer una novela como esta. No os voy a engañar. LA JOVEN AHOGADA no es una lectura fácil, pero sí atrapa con tremenda facilidad, sobretodo en los primeros capítulos en los que la narración es medianamente coherente, explicativa y relativamente lineal. E incluso llegando al final de la obra, cuando a simple vista nada tiene sentido, y te sientes incapaz de relacionar los hechos relatados, necesitas seguir adelante, saber si todo lleva a alguna parte o estamos ante el desvarío enfermizo de la esquizofrenia paranoide jugando con nuestra cordura. No faltaron ocasiones en las que creí estar leyendo un diario autentico basado en hechos reales portagonizados por la escritora.

Estamos, como dice S. T. Joshi ante una historia de fantasmas sobre la escritura de historias de fantasmas y sobre el don o la maldición que supone la locura. Un relato donde la obsesión es peligrosamente mortal y donde absolutamente nada es lo que parece. Una novela, me reitero, en la que no vas a encontrar lo que buscas, sea esto lo que sea, pero que sin embargo no quiere decir que tu descubrimiento sean en vano, para nada. Igual no es lo que querías leer... sino lo que debías leer.


domingo, 8 de febrero de 2015

Reseña: EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS de Paul Pen.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS de Paul Pen.

Tengo diez años y llevo toda mi vida dentro de este sótano. 

Vivo en la oscuridad con mis padres, mi abuela, mi hermana y mi hermano. Todos están desfigurados por el fuego. Mi hermana lleva una máscara blanca para tapar sus quemaduras, porque papá dice que su cara podría asustarme. Me gusta mi cactus. Me gusta leer mi libro sobre insectos. Y tocar durante horas el único rayo de sol que se filtra por una rendija del techo. Pero desde que mi hermana tuvo al bebé, todos actúan de forma extraña. Creo que me cuentan mentiras sobre quién es el padre, sobre el Hombre Grillo que acecha por las noches, sobre lo que sucedió antes de que yo naciera, sobre por qué estamos aquí encerrados. Por lo menos tengo a las luciérnagas. Llegaron hace unos días al sótano y las he guardado en un bote. Como dice mi abuela, no existe criatura más fascinante que aquella que es capaz de crear luz por sí misma. Esa luz me anima a conocer el mundo exterior, escapar, descubrir qué le sucedió a mi familia. Lo malo es que aquí todas las puertas están cerradas. Y no sé dónde voy a encontrar una salida...

Últimamente noto que estoy sufriendo cierto encariñamiento por las historias minimalistas, donde el escenario donde transcurre la acción es tan ínfimo que fácilmente podría interpretarse como una obra de teatro. Un claro ejemplo de ello es la reciente película MUSARAÑAS, dirigida por Juanfer Andrés y Esteban Roel y magníficamente protagonizada por Macarena Gómez, o VANISH, una cinta donde la acción transcurre únicamente en el interior de una furgoneta. Sin olvidarnos de un clásico a mi parecer olvidable como es BURIED y sus 93 minutos de entierro en vida. El ejercicio de contar un relato en un espacio cerrado ayuda mucho a mi parecer a hacer que uno forme parte de la historia, a sentirse íntimamente ligado a los acontecimiento, pero al mismo tiempo sintiendo una tremenda impotencia al no poder hacer nada pese a sentirse en el mismo lugar de los protagonistas.

Algo similar ocurre con EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS de Paul Pen, la segunda novela de este escritor madrileño y cuya lectura fui aplazando sin motivo coherente hasta ahora.

La novela nos traslada al interior de un sótano donde vive una familia compuesta por el protagonista, un niño de 10 años, sus padres, su abuela, y su hermano y hermana mayores. Todos los miembros de la familia salvo el sufren severas deformidades causadas por las quemaduras del fuego. Como es normal, un niño a esa edad empezará a cuestionarse muchas cosas ¿Que hay fuera? ¿Por qué no pueden salir? ¿Quien es el padre del niño que acaba de dar a luz su hermana mayor?

Estas y otras preguntas que nos irán surgiendo a los lectores funcionarán como pistoletazo de salida para una obra que mezcla thriller psicológico, drama y una dosis de terror.




Tengo que admitir que el primer contacto con el libro me resulto tan pesado como una losa de granito sobre mi cuerpo. Tras abrirse el telón y da comienzo la trama no podemos evitar sentirnos descolocados, fuera de lugar y con mil preguntas bullendo en nuestra cabeza, como si hubiéramos empezado un libro desde una pagina aleatoria. No obstante, esa sensación de querer de dejar de leer por pensar que no te enteras de nada va menguando, y transformándose en una necesidad de saber mas y mas, de descubrir la verdad a cuentagotas, aunque cuando crees que te han desvelado algo, mil preguntas mas surgen de ninguna parte. Es decir, cuando quieres darte cuenta, EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS te ha atrapado y por mucho que te agites no te va a dejar salir.

El principal atractivo que hace que esta novela te absorba por completo es su atmósfera, un sótano bajo tierra en constante penumbra y con el aire cargado de secretos va llenando tu mente de una extraña claustrofobia, e irá empeorando, tornándose en inquietud, angustia e incluso asfixia. Eso, sumado a una narración ágil en los diálogos pero pausada en los acontecimiento hará que apretemos el libro pensando que estamos arañando las paredes de una habitación sin ventanas y dejándonos las uñas en un intento de salir de ahí. No toda la integridad de la novela va a ser así, seamos realista. No faltarán secuencias que, sin ser relleno o sobrantes, permitirán ese ansiado respiro al lector, aunque a veces se torne demasiado largo.

Paul Pen no se entretiene en descripciones y deja que seamos nosotros quienes rellenemos los huecos que faltan en la historia, formándonos imágenes que incitan a usar las ideas mas sucias y macabras que se nos ocurren. Pero no siempre harán falta, personajes como el hermano del protagonista y sus extrañas costumbres o la hermana, enfundada en esa mascara blanca sin expresión se bastan para poner los pelos de punta a cualquiera. Es mas, no solo el uso de las descripciones se verá reflejado en su mínimo exponente. Como nota curiosa cabe mencionar que en ningún momento se usan nombres propios, ni para los personajes ni para las ubicaciones. Nunca. Solo se menciona un libro.
Ademas, el autor usa varios registros para narrar la historia, predominando la primera persona del protagonista también encontraremos un tramo escrito en tercera persona donde el cambio de estilo es mas que palpable y

Pero pese a la cantidad de intrigas, misterios y sustos que predominan en la historia, EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS es una historia sobre como la inocencia de un niño puede superar el oscuro mundo que le rodea ayudado por la imaginación, por las ocasionales buenas intenciones, y la curiosidad. Porque no olvidemos que en un escenario así algunas personas son capaces de hacer cualquier cosa por escapar de ese camino a medias al infierno que puede ser años y años encerrado en un sótano y eso se traduce en escenas bastante duras, pese a que el drama es lo que predomina en la obra.

No voy a caer en elementos de la trama porque es una novela de spoiler fácil, así que me limitaré a decir que EL BRILLO DE LAS LUCIÉRNAGAS es, pese a un costoso comienzo, unas resoluciones a veces demasiado rebuscadas y un epilogo, aunque precioso, algo sobrante, una grandiosa novela, que agarra al lector sin posibilidad de escape, dura y bella a partes iguales. Una historia que, como dije antes, se podría disfrutar como una obra de teatro (En la misma novela se menciona que va a ser llevada al cine. Ya veremos cuando de verdad hay en eso).  Una historia oscura pero con personajes que, como las luciérnagas, brillan con luz propia.


viernes, 6 de febrero de 2015

Reseña: SUEÑOS Y SOMBRAS de C. Robert Cargill



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

SUEÑOS Y SOMBRAS de C. Robert Cargill

Junto a nosotros hay un mundo en el que la materia de la que están hechos los sueños se hace realidad. Una vez que conoces ese mundo mítico que ha pervivido junto al mundo moderno, no vuelves a ser el mismo. “Sueños y sombras” nos lleva más allá de ese tenue velo. Relata la historia de dos muchachos desde su fatídica infancia en el reino de la magia hasta que se hacen mayores. Ewan es ahora músico y Colby, un librero poco común. Pero si Ewan y Colby abandonaron de niños aquel reino, éste nunca los ha olvidado.

Desde los orígenes de la literatura fantástica y terror han existido autores que han recurrido a nuestros recuerdos de la infancia, a los cuentos populares o a las creencias feéricas de la tierra para contar historias. Pero historias como nunca antes las habíamos leído. Atrás quedaron esas bellas hadas con alas de libélula tiernas y adorables, las sirenas que se enamoran del marinero naufrago al que terminan salvándole la vida y sacrificándose ellas mismas por amor, o los gnomos que te prometen marmitas de oro al otro lado del arco iris.
No. La realidad que estos escritos nos quiere mostrar es bien distinta. La naturaleza de estas criaturas fantásticas es terrible, cruel y en muchas ocasiones sanguinarias como solo el mejor cuento de terror puede relatar.
Ya nos lo avisó Terry Pratchett en LORES Y DAMAS mostrando a unos crueles elfos, Guillermo del Toro con su catalogo de criaturas de la saga HELLBOY o en EL LABERINTO DEL FAUNO o el decadente panorama que Alejandro Guardiola creó en CALLES DE CHATARRA, las criaturas malignas y arrogantes de Concepción Perea en LA CORTE DE LOS ESPEJOS. Y así podría tirarme hasta que el teclado echase humo.

Pero SUEÑOS Y SOMBRAS de C.Robert Cargill va mucho mas allá.

Es posible que el nombre del autor les sea a muchos desconocido, los críticos cinematográficos suelen pasar desapercibidos, pero seguro que muchos lo reconocen por ser el guionista de una cinta de terror de bastante importancia del 2012 (Que sea buena o mala ya es a opinión individual) titulada SINISTER. Amen de la inminente secuela y otros largometrajes.

En su debut literario Cargill ha decidido echar toda la carne en el asador y todos los ingredientes que ha ido encontrando en una misma parrilla creando con ello una obra sin género y con muchos géneros al mismo tiempo: Fantasía urbana, Terror. Thriller, aventuras, fabulas, gore... todo esto es lo que el sorprendido lector encontrará en SUEÑOS Y SOMBRAS, bajo el velo de un compilado de historias de siempre pero como nunca antes te las habían contado.

La novela se centra principalmente en dos personajes, Ewan y Colby, cuyas aventuras se nos presentan desde su infancia en la primera parte del libro, relatándonos como por unas u otras circunstancias sus vidas se verán ligadas muy estrechamente con el mundo de las criaturas de otros mundos. Ya en su segunda parte será donde, ya siendo adolescentes descubrirán que no es tan fácil escapar de ese pasado de ensueño... o mas bien de pesadilla.

Si, pesadilla, porque las criaturas que ha creado Cargill en SUEÑOS y SOMBRAS son sumamente terroríficas, sanguinarias y brutales, protagonizando escenas que pueden causar autentica repulsa y hacer que la bilis se te suba a la garganta. Respondiendo a tu pregunta: No, esta novela no es apta para estómagos sensibles ni gente impresionable que busca en sus paginas un  bonito cuento de hadas. Aquí no se comen a las perdices. Aquí se las tortura y se las deja desangrar en publico.

Y en su manera de narrar atrocidades y belleza en las imágenes es donde descubrimos lo que es capaz de hacer un guionista de cine cuando se propone escribir una novela. La obra posee una potencia visual tremenda, destacando, como no, en las escenas de acción y secuencias de terror, imaginándonos giros de cámara, primeros planos y salpicones de sangre y vísceras a doquier. Hay lugar hasta para banda sonora y efectos especiales Light & Magic. Tras leer una de las numerosas secuencias de este tipo a uno le entran ganas de empaquetar una copia del libro y mandársela con una nota a Guillermo del toro que ponga "Ya estas tardando en rodar esto".

La trama también es digna de mención. Cargill sabe lo que debe mostrar y lo que no, conoce el momento en que debe desvelar algo y cuando mantener oculto un misterio. Es posible que alguno termine liándose, algo claramente aceptable teniendo en cuenta la cantidad de personajes que pueblan la historia, y las distintas razas que se nos presentan, con sus cualidades, actitudes y necesidades. Por suerte, entre capitulo y capitulo muchas veces encontraremos interludios en forma de fragmentos de descripciones y fabulas de estas criaturas, lo que nos ayudará en los momentos clave a entender el porque de una cosa y de otra. Una lectura adictiva como pocas.

Quizás el único "pero" que encuentro sea en la predisposición que tiene el autor con los personajes. Es decir, Colby, Ewan, Yashar, Knocks, el Coyote, son personajes muy cuidados, que guardan muchas sorpresas dentro, el que parece el bueno a lo mejor no es tan bueno y viceversa. Sin embargo son todos personajes masculinos. Da la sensación de que ese cuidado no se ha contagiado en la figura femenina, puesto que no hay ninguna que destaque o vaya mas allá de un estereotipo de "heroína dramática" Puede que quien la haya leído mencione a Mallaidh, comprensible, pero personalmente a mi me parece un personaje repelente.

SUEÑOS Y SOMBRAS gusta, y mucho. A ti te puede gustar mas o menos, dependiendo de lo que busques y en que cantidad busques cada ingrediente, pero os aseguro que a medida que avanzáis en la historia os daréis cuenta de que no es para nada lo que esperabais, pero sera para bien, A mi personalmente me ha llegado hondo por tener lo que yo en ese momento necesitaba leer en su cantidad justa.

El debut literario de C. Robert Cargill es, en definitiva, magnifico. Es lo que hubiera escrito J. K. Rowling si se hubiera aficionado al terror. Es lo que el equipo responsable del diseño de los personajes de El Ejercito Dorado se morirían por convertirlo en un espectáculo grotesco cinematográfico. Es un libro que no es que pida una segunda parte (que por cierto ya existe y cruzo los dedos porque se publique pronto en nuestro país), sino una saga continua.

domingo, 1 de febrero de 2015

Reseña: EL RITO de Laird Barron



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

EL RITO de Laird Barron.

En la periferia de nuestra existencia, acechando desde oscuridades más profundas que el Cosmos y que se extienden más allá del círculo de luz de nuestra hoguera y del calor de la conciencia, existen cosas extrañas... magia negra, cultos abyectos, rituales obscenos y entidades abominables que operan al amparo de las sombras. Los Hijos de la Vieja Sanguijuela llevan con nosotros desde tiempos inmemoriales. Y nos aman. 

Donald Miller, geólogo y académico, ha vivido casi toda su afortunada existencia al borde de un abismo, debatiéndose entre una cómoda ignorancia y un secreto enloquecedor. Ahora, al final, todo debe converger. Donald descubrirá los oscuros secretos que se ocultan en los bordes, en los rincones y las grietas de la realidad y de su propia consciencia, desenterrando verdades aterradoras sobre su esposa Michelle, sus mellizos adultos y todo lo que él conoce y en lo que confía. Y es que Donald está a punto de enfrentarse con... El Rito.

Laird Barron es un escritor hasta hace poco prácticamente desconocido en nuestra tierra (Llamadme la atención si me equivoco, pero la primera y única aportación a la literatura que ha llegado a España es a través de la antología ALAS TENEBROSAS: 21 CUENTOS DE HORROR LOVECRAFTIANO, editado por la misma editorial) cuya escritura se dice está influenciada por una infancia dura en la vivió aislado y bajo muy duras condiciones en Alaska. Sea verdad o no, sí es cierto que su estilo literario es una mezcla de distintas vertientes de géneros, desde el terror, la novela negra, el pulp o la ficción extraña (Weird) y, como si se tratara de un consolidado de la cocina fusión, no se corta en mezclar dos o mas de estos géneros para crear historias, las cuales ya se cuentan en mas de medio centenar de colaboraciones en antologías, publicaciones en magazines y dos novelas, cuyo último trabajo EL RITO, nos ha traído recientemente la colección Insomnia de VALDEMAR.

Y si la obra practica la fusión de géneros, la opinión no se aleja mucho de la mezcla de sensaciones y sentimientos, que navegan entre el asombro y el sopor.

EL RITO es una obra de horror cósmico y suspense, que puede considerarse una inspiración y homenaje al maestro lovecraft, pero no solo por la historia que gira en torno a los hijos de la Vieja Sanguijuela, sino que esta admiración por el hombre de Providence destaca también por el estilo literario que maneja Laird Barron, capaz de mezclar el estilo contemporáneo y crudo de novela de terror con un estilo de narración clásico y purista e incluso algún toque cómico.

El problema viene cuando el autor al parecer intenta demostrar todavía mas algo que lleva demostradas desde las primeras paginas, que tiene talento para las letras, y lo hace olvidándose de donde está el freno, pese a ser consciente de que, aunque lo que tenga delante sea una recta que se pierde en el horizonte, tarde o temprano tiene que llegar alguna curva, lo que en las paginas se traduce en capítulos de interminables historias que en muchas ocasiones no llevan a ninguna parte ni son relevantes para el desarrollo de la novela. Puede deberse o no a que Barron se desenvuelva mejor en el relato corto y necesite engordar una historia que en principio se puede contar de forma muchísimo mas breve. O puede simplemente que sus personajes le generen tanto cariño que deba ahondar en ellos hasta casi escribir una biografía completa de sus vidas, cosa que hay que reconocer que es digno de halagar. Me refiero al cuidado en el cincelado de sus personajes, destacando, como no a Don Miller y a Michelle.

Portada original de la novela y para mi gusto, la que tenían que haber mantenido.

EL RITO abre con un primer capitulo simplemente sensacional. Una revisión de un cuento de hadas muy conocido pero contado de una manera sumamente retorcida y para nada apta para niños que quieras que se duerman.
A partir de ahí la narración, la cual salta a distintos planos temporales como 1958, 1980 o la actualidad (aquí 2012), se convierte en una montaña rusa de emociones en la cual pasaras de encogerte de tensión a clavarte palillos en los parpados para no caer desfallecido entra vueltas y vueltas que da la historia. Nos aterrorizaremos con imágenes impactantes que germinan en nuestra mente que generará figuras de lo mas macabras si, pero la espera de la próxima nueva sensación similar a lo largo de la lectura se hará en ocasiones demasiado larga.

Por fin, llegando al ultimo tercio de la novela, el autor se da cuenta que estaba contando un relato de terror y lleva al lector por los derroteros correspondientes, acumulando toda la intriga y el misterio que echamos de menos a lo largo de la vida presente y pasada de Donald Miller y donde elementos que creíamos poco importantes convergen en un ultimo capitulo fantástico que consigue que, pese a haber acumulado sapos y culebras que soltar cuando nos pregunten por nuestra opinión, terminemos rindiéndonos ante la evidencia de que EL RITO es bueno, muy bueno.

No obstante, durante su lectura he tenido la sensación de estar leyendo un relato de disfrute intimo, como cuando escuchas un disco de un grupo de esos que conoces tu y cuatro monos mas. Te sientes orgulloso de conocerlos, pero prefieres no hablar mucho del tema, quedártelo para ti mismo y no mencionarlo cuando alguien te pida recomendaciones, porque quieres seguir que siga siendo así, sin que nadie ponga pegas a tu opinión.

EL RITO ha supuesto una agradable sorpresa en el descubrimiento de este autor que, sin embargo abre grandes expectativas a su desenvoltura en los relatos cortos. Es mas, si me dieran a elegir entre que se publicara una recopilación de estos o una novela completa, me decantaría sin dudar por lo primero. Laird Barron tiene muchísimo talento, se desenvuelve maravillosamente con las palabras, pero quizá le falte darse cuenta de que el lector no siempre busca tanto como lo que él da, sino unas dosis mas ajustadas, que no lleguen a empachar.