domingo, 5 de julio de 2015

Reseña: SANGRE FRÍA de Claudio Cerdán.



Autopsias Literarias del Dr. Motosierra presenta:

Reseña: SANGRE FRÍA de Claudio Cerdán.

Una novela épica y de acción desbordante con sobredosis de podridos y mucho humor negro.

Cuando el Perrolobo sale de la cárcel, su antiguo jefe le exige una vieja deuda de drogas a cambio de la vida de su hijo. Para poder pagar, reúne a su antigua banda y decide atracar un furgón blindado justo el día en que se desencadena el apocalipsis zombi… Pero Perrolobo es un criminal con recursos y está acostumbrado a improvisar, así que ¿qué mejor momento para hacerse con el control del negocio de la coca? Mientras trama su gran golpe de estado entre zombies desbocados, tendrá que luchar por su vida ya que dos de sus peores enemigos lo buscan para matarlo… ¿Qué más podría salir mal?

Si Terry Pratchett y Chuck Palahniuk hubiesen escrito juntos una novela Z, se parecería mucho a esta.

He llegado a ese punto. Si, tras más de centenar y medio de novelas de género Z leídas la fascinación, curiosidad y emoción que vivía antes ha desaparecido y esas emociones han sido sustituidas por miedo, desconfianza y hastío. Cuando comenzó el boom de las novelas de zombis lo normal era descubrir autores y obras muy interesantes (Vale, descartamos la saga de David Wellington, que fue de las primeras en publicarse en España). La saga APOCALIPSIS Z de Loureiro, GUERRA MUNDIAL Z de Brooks, Y PESE A TODO de Garduño, entre un gran etcétera llena de variedad historias distintas y el tener la sensación de que ante nosotros se nos abre una puerta llena de posibilidades. Pero no mucho, sino que dicha puerta solo se abría un poquito cada vez, animando al lector a seguir y seguir acumulando historias para ver que se oculta en la habitación cerrada.

Ahora sin embargo, cuando ya hemos abierto esa puerta y desvalijado completamente el interior del cuarto uno empieza a temer que ya no hay nada mas que descubrir, que atendemos al lanzamiento de una nueva novela Z con un sencillo encogimiento de hombros y un "a ver a cuantas novelas y películas copian esta vez" Esa sensación se acrecenta cuando, además, el autor pretende mezclar el terror de loz zombis y la comedia.

Dolmen, en su Línea Z ya lo ha intentado un par de veces. La primera fue con ZOOMBI de Alberto Bermúdez. Un intento de sacarnos unas cuantas risas en medio de una trama de supervivencia en pleno apocalipsis. Digo intento porque, al menos conmigo, no lo consiguió en ningún momento, y más que divertirme, su excesiva necesidad de parodiar los estereotipos de sus personajes y la consecuente artificialidad de la historia me cabreaba.  Más recientemente lo intentaron con ESPAÑA: GUERRA ZOMBI de Jaime Noguera. Una historia con fecha de caducidad que no sabía distribuir correctamente sus intentos de comedia ni intentaba camuflar una clara falta de originalidad en la estructura de la obra. No se le puede pedir peras al olmo, ni una buena historia a una novela recomendada por "celebridades" como Santiago Segura o Torbe.

Hablando de refranes. Hay otro que dice que a la tercera va la vencida. Por suerte es tan cierta una como la otra.

Y es que SANGRE FRÍA de Claudio Cerdán no es solo una buena novela, sino una más que aceptable comedia.
Vale, en la sinopsis se menciona a Sir Pratchett y a Chuck Palahniuk, dos comparaciones que a mi parecer, son poco pensadas y bastante desacertadas. Leer SANGRE FRÍA es como ver una película dirigida a partes por Ruben Fleisher (ZOMBIELAND), Edgar Wright (SHAUN OF THE DEAD) y Quentin Tarantino. Sin olvidar algún que otro fragmento donde parece que Jim Abrahams mete mano descaradamente.

Humor negro, macabro, soez y barriobajero se dan la mano dentro de una trama que, en principio, no es que quiera alardear de originalidad dentro de la estructura mas típica de las historias de muertos vivientes. La obra nos sitúa en una incierta ciudad pero con bastantes alicientes para que pensemos que podría ser cualquiera de las nuestras donde, de la noche a la mañana, los viandantes con ansias de quemar sus tarjetas de crédito son sustituidos por hordas de muertos vivientes y su correspondiente apetito insaciable de carne humana. Y digo bien de la noche a la mañana, porque estos son de los que a los segundos de morir ya te has convertido en uno de ellos.
Con este paisaje se encuentra Juande "Perrolobo" al poco de salir de la cárcel. Bueno, con esto y con un marrozano tras otro que tienen que ver con los hechos que le llevaron a pasar una buena temporada entre rejas.
Así pues, este panorama es el ideal para que Cerdán cree una atmósfera sucia, opresiva y cruel a la vez que realista y muy actual. Sus personajes parecen sacados del casting de lo mas bizarro que se haya podido ver en Callejeros. Yonkis, gitanos, prostitutas, policía corrupta y un sinfín de variedad sociocultural que el autor parodia pero sin llegar al extremo de lo absurdo, salvo contadas excepciones y que ayuda a pensar que el hecho de que la historia tenga zombis es solo una excusa tan valida como para cualquier otra para ponerlos en escena y dejarlos a su libre albedrío.

Pero no es solo la carcajada fácil lo que vienen a ofrecernos los protagonistas principales de SANGRE FRÍA. Su mimado trato y su cuidado desarrollo calan hondo en el lector, sacándonos sonrisas, confusión, ira e incluso ternura en más situaciones de las que imaginamos. Se podría decir que Matraca, La Chunga, El Cani y demás figuras secundarias están plasmadas bajo los estereotipos clásicos del género, pero cada uno moldeado dependiendo del entorno que le rodea y las circunstancias que le han llevado a donde están, con pasado, presentes y futuros oscuros que los convierten en personas rotas pero supervivientes. No solo supervivientes a la amenaza de los zombis, sino al día a día del mundo hostil donde viven.

Pero si hay un personaje con una personalidad chocante, inesperada y confusa es, sin duda, Perrolobo. Gitano, delincuente, padre, más chulo que el Coche Fantástico y más cafre que un bocata de escombros; pero que, sin embargo, encontrará en su misión una manera de redimirse, de afrontar su destino y de valorar qué es lo mas importante para él.

No había leído nunca antes nada de Claudio Cerdán, y tengo que admitir que me ha sorprendido su manera de narrar historias. Su mezcla de géneros que van desde el terror, la novela negra y la comedia más gamberra se convierte en una lectura tremendamente ágil y adictiva, sin altibajos ni caídas de ritmo, que invita a leer capítulo tras capítulo con ansia morbosa y placer culpable. Amén del uso de un lenguaje sumamente callejero y vulgar, recopilando una colección de insultos y amenazas por las que firmaría el propio Tarantino. No sé cómo serán obras suyas de tono mas serio como UN MUNDO PEOR o CIEN AÑOS DE PERDÓN, pero os aseguro que ya cuentan en mi lista de próximas lecturas para descubrirlo.

Capítulos que, por cierto y como curiosidad, encontramos desordenados (Por ejemplo, del capítulo 2 pasamos al 22 y luego al 4) pero que no por ello vuelve confusa la lectura sino que, muy al contrario, mantiene la intriga y desvela giros que no serán entendidos hasta más tarde.

A diferencia de otras, la comedia usada en SANGRE FRÍA no se basa en chistes con fecha de caducidad como se comentaba antes, ni en el uso del famoseo casposo actual al que recurrió el infame ¡ZOMBIFICALO!. Su variedad recorre distintos tonos de la paleta, desde el más negro al más oscuro tono rojo víscera. Desde escenas que bien nos haría rememorar a lo mejor de la mencionada ZOMBIELAND hasta coñas más cafres y absurdas que parecen heredadas de películas de Juanma Bajo como AIRBAG. Todo ello plasmado en situaciones, personajes y escenarios tan delirantes como reconocibles y a veces tristemente cotidianos. Y que no falte el gore, ya que entre sus páginas tienes casquería para dar y tomar, con momentos que hará fruncir el ceño de asco al más preparado para después hacerle desatar una buena tanda de carcajadas.

Sin olvidarnos de los numerosísimos guiños (aunque a veces parezcan burlas) de otros títulos del género Z (que curiosamente suelen coincidir en encontrarse todos o casi todos dentro de la misma editorial). Una curiosa manera de poner a prueba al lector a la hora de reconocer situaciones y personajes de lo más característicos y recordados, y sin ser demasiado veterano en el género. Yo creo que he descubierto todos los homenajes a las obras invitadas, aunque seguramente alguna se me puede haber escapado. A ver como se os da a vosotros.

Quizá como única pega mencionaría los momentos mas absurdos de la historia. Escenas donde parece que el autor busca urgentemente la risa fácil con lo primero y más ridículo que se le pase por la mente. Vale que la comedia sea un elemento predominante y constante en la historia, pero algunas salidas parecen más piedras en las que tropezarse en el camino que rampas que ayuden a seguir la línea argumental.

SANGRE FRÍA es, en definitiva, uno de los más disfrutables e interesantes títulos de la línea Z desde la tercera entrega de EL CUARTO JINETE. Si Perrolobo intenta buscar su redención en esta novela, Dolmen ha encontrado la suya, tras varios títulos nefastos, publicando un trabajo muy recomendado para los que busquen una historia de esas que lo tengan todo: humor, acción, sangre y un toque de drama decorado con una pizca de crítica social.

No dudéis en darle una oportunidad

1 comentario:

  1. Hola!!! no soy mucho de este genero, la verdad es que no he leido nunca una novela sobre zombies, pero esta justamente me acaba de llegar hoy de la editorial y me da ganas de descubrir este genero. Aunque me descoloca un poco eso de los capitulos desordenados.
    Por cierto, acabo de descubrir tu blog y ya te sigo y te invito a visitar mi blog
    Un abrazo

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